Supertubos 2015
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31/10/2015Te sientas en el lineup y los ves pasar todo el tiempo con su movimiento majestuoso (bueno el que lo gaste). Si el día está flojo la mayoría de olas que remes ya van a tener un longboarder encima. El shortboard es divertido pero tiene mucho menos volumen que un cañonaco de 3 metros. Como para todo hay días y días.
1. Los días de mierda pueden llegar a ser la bomba
Si montas una tabla que está especialmente diseñada para olas “buenas” u olas potentes, lo más probable es que la mayoría de los días sagas del agua frustrado por el simple hecho de que tu tabla no se ajusta a las condiciones. Las olas “buenas” no son tan comunes. De hecho diré más: No hay olas malas si la tabla es la adecuada. Los días que ve en la previsión una altura de 30 cm la mayoría de la gente ni se acerca a la playa, solo un longboarder puede cabalgar algo así.
2. Hará mejorar tu surf
Longboard es una tabla se movimientos suaves que te perdona los errores. Un longboard es la mejor manera de desgranar los secretosde la mecánica de las ondulaciones. Si montas una tabla más corta necesitas anticiparte a la ola mientras que con un longboard si no sabes lo que viene la tabla te lo pedirá. Aprenderás a mover el peso del cuerpo sobre la tabla para acelerar, frenar y entenderás que los giros no se hacen batiendo los brazos.
Esta compresión de la ola suavizará tu estilo y le quitará esa electricidad. Te ayudará en tu surf y cuando suban las olas podrás volver a coger el shortboard, habrás aprendido mucho más que si hubieses utilizado todos esos días la tabla pequeña.
3. Vas a hacer amigos
Ya sabemos que ir a coger olas no es el patio del recreo, hay bastante rivalidad desgraciadamente. Pero si vas con frecuencia a un lugar donde coincides con más gente que anda en tabla larga es inevitable empezar una conversación. Montar longboard hace más fácil conocer gente con experiencia y son ellos los que tienen historias buenas que contar.
4. No se te escapará ni una ola.
Las sed por coger olas no se sacia nunca, pero un longboard te puede ayudar a coger muchas más. Es tan simple como que tiene volumen suficiente para mantenerte constantemente fuera de agua y quieras o no es facilita mucho las cosas. Las olas que ni remarías en otra tabla, con un long puede ser de lo mejor que te ha pasado en la vida.
5. La variedad es la sal de la vida.
La paella es un plato riquísimo y puede ser tu favorito, pero si te la ponen en las tres comidas del día los siete días de la semana durante el resto de tu vida, pues puede cansar un poco. Esa claro que serías el mejor del mundo comiendo paella, pero si de vez en cuando te pusiesen un pincho de tortilla te harían la persona más feliz del mundo.
Con el Surf pasa lo mismo en la variedad está el tesoro. Cada día hay condiciones diferentes y cada día puedes usar la tabla perfecta. Entiendo que no vas a tener 365 tablas, ojalá, pero un par…y si me apuras con un longboard me basta y me sobra para emocionarme.
Foto: jdseyres