La batalla está en el Pro Gold Coast
13/03/2018La nueva tabla de Kelly para volar este verano
25/03/2018Cuando Griffin Colapinto se levantó aquella mañana no sabía lo que se le venía encima. No, no hablo de un personaje de Mortadelo y Filemón pespuntado en la genial mente de Ibáñez, aunque el nombre se lo merece. Hablo del Rookie que de momento es el del año. Ese chiquillo que se ha marcado una ola con tres tubos y que se ha llevado el primer 10 del año.
El tubazos de su vida
Colapinto se metió al agua con el número 99. ¿Casualidad? ¿Llegó el último al reparto de números? Ni mucho menos. Con sus 19 años de edad, él ya sabe muy bien en quién fijarse. Ese número 99 no es nuevo pero sí es cierto que estaba libre. Era del veterano Taj Barrow. El Rookie se hizo con orgullo del número de su ídolo y no había nada mejor para honrarlo que dejarlo bien alto en su primera competición con el mejor surf que ni él mismo sabía que podía dar.
Se tomó la decisión de mover el Pro Gold Coast desde Snapper hasta Kirra. Un spot un poco más metido en la bahía con más secciones pero que de vez en cuando salen tuberas. Durante los cuartos de final que enfrentaban a Michael Bourez contra Griffin Colapino, el Rookie cogió la mejor hola que se ha visto en el evento y el primer 10 del año.
Una ola larga con tres secciones que dieron de sí tres tubos. En el primero entro de lleno y cuando salió el siguiente ya estaba cerrando. Corrió un poco por la pared para meterse en el segundo súper profundo y atravesarlo de un lado al otro. Cuándo salió no se lo creía quiso abrir los brazos para celebrarlo con el público que se agolpaba en la playa pero tuvo que cerrar de nuevo los brazos por ¡le volvía a encerrar otro tubo!
El último fue al más cruel y le hizo cerrote pero justo antes de atraparle Colapino salió con los brazos en alto. De sus propias palabras me quedo con: “Ha sido la mejor ola de mi vida”.