El Surf en Europa

Hawai, unas islitas en mitad del pacífico a unos 12.000 km del viejo continente. Un lugar remoto del cual las primeras noticias sobre sus gentes y su cultura llegaron de manos del capitán Cook, al cual le sorprendería la curiosa forma en que sus habitantes cabalgaban las olas.

Casi 180 años después el guionista Perter Viertel se acercó al rodaje de su adaptación cinematográfica de la novela de Hemingway  The Sun Also Rises. Una de las partes del rodaje se llevó acabo en Biarritz, hoy día mundialmente conocido en la escena surf, pero por aquel entonces nadie había surfeado nunca en el viejo continente. Peter como buen californiano era un aficionado al deporte al igual que el hijo del productor el cual mando un par de tablas junto a todo el equipo de rodaja a Francia. Y así fue como Peter Viertel se convirtió en el primer hombre en cabalgar las olas de Biarritz y de Europa. Los jóvenes locales como Joël de Rosnay quedaron prendados con las hazañas de Viertel y ellos también comenzaron a practicar este maravilloso deporte.

Pronto la noticia volvió de vuelta al otro lado del charco, y comenzó una migración de estadounidenses y australianos para buscar olas en el viejo continente huyendo de las masificadas playas de california. Y poco a poco se fue extendiendo el surf por toda la costa atlántica europea hasta llegar a nuestro país. En 1963 Jesus Fiochi trajo por encargo y desde Francia la primera tabla de surf propiedad de un español que se tenga constancia. Por aquel entonces España era un país poco permeable pero la cultura surf consiguió encandilar a una gran generación de surfistas.

Tanto fue así que en 1968 hasta el NO-DO se hizo eco de esta tímida cultura surf made in Spein!